Fuente de la información. Periodista y Comunicador Gregory Camacho López
La República Dominicana atraviesa por la peor crisis migratoria y de seguridad internacional en toda su historia. Por el momento el sector turístico empresarial ha convertido la amenaza haitiana y la crisis en crecimiento del turismo haitiano en nuestra Quisqueya.
Algunos datos y medios describen como el turismo de la Hispaniola, para todos los nacionalistas es el turismo fusionado. Este proyecto abominable fue analizado por el Dr. Juan Lladó, bajo el término «complementariedad turística». Esta vil haitianización fue analizada en el año 2012 para iniciar a partir del año 2020, pospuesta por la pandemia del COVID-19, por ello desde ahí el inicio del turismo a granel.
Mientras nuestras calles se haitianizan ingresando haitianos de todos los países, nuestro Gobierno no quita restricciones aéreas hacia Haití. La opción de estos viajeros es Quisqueya y no su país. Este flujo turístico binacional de masas se empieza a ver en las calles dominicanas.
Estos fondos saldrían de múltiples ONG, una de ellas FOMIN y el Centro Dominico Haitiano. Estas reuniones contemplaron un tren desde Punta Cana y el Cibao a Puerto Príncipe. La «patria común» es una realidad empresarial alejada del nacionalismo y del sentir nacional.
Nuestro país republica dominicana supuestamente recibe más turistas que la población local, según el ministro de Turismo. Mientras Haití se desmorona, la Republica Dominicana recibe el «boom turístico». Las bandas haitianas ayudan a traer más «turistas» a la patria de quien un dia le llamamos Juan Pablo Duarte y Diez .
El presidente Luis Abinader cerró el espacio aéreo con Haití desde marzo de 2024. Esto ha ocasionado que el país sea un puente y refugio para haitianos.
Los haitianos constituyen la mayoría de los usuarios en los viajes internacionales, por ello vemos el crecimiento de las aerolíneas criollas. Esto explica las ganancias del cierre de los aeropuertos y un turismo poco deseable por el pueblo dominicano. Los haitianos aunque tengan visa dominicana no están autorizados a viajar directamente a nuestro país.
Los haitianos hacen entrada al país y algunos no se quedan en el país aun tengan visa dominicana, la cuestión es preguntarnos si los suman como turistas.
En los hoteles dominicanos de Punta Cana abundan los haitianos y al parecer gozan de «patente de corso». Nuestro país su fuerte es el turismo y dos magnates empresarios, aliados de los partidos tradicionales, acudieron al Banco Mundial y al Banco Interamericano de Desarrollo, en Washington, a exponer su proyecto. La Corporación de Fomento Internacional, que es el brazo privado del Banco Mundial, les recibió con los brazos abiertos.
El decreto 691-07 se está abusando de él. La diáspora haitiana ve como opción, al no poder ingresar a su país, pues ingresar al nuestro. Sería oportuno antes de que nos aclaren, turista por turista, lo que está pasando con esta ola de turismo: ¡que las autoridades esclarezcan estos asuntos!
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